Los cursos de refresco o reactivación son actividades de buceo guiadas por un instructor que nos permiten recuperar la confianza y recordar las habilidades básicas de buceo en un entorno seguro y controlado.
En el caso de PADI, se les llama ReActivate.
Este programa está recomendado para buceadores que han pasado más de un año sin bucear, o incluso a partir de los 6 meses, si tienes muy poca experiencia. La decisión de si te hace falta o no depende de ti, pero lo normal es que el centro de buceo te exija realizarlo si no has buceado en los últimos 12 meses.
Los refresh suelen incluir un pequeño repaso de la teoría del Open Water Diver, algunos ejercicios bajo el agua y una inmersión sencilla para acostumbrarnos de nuevo a las sensaciones.
Los requisitos para hacer un curso de refresco son:
- Ser buceador certificado (PADI u otro)
- Edad mínima: 10 años
- Duración: 1 día
- Inmersiones: 1, se pueden añadir buceos adicionales
- Profundidad máxima: 12 metros
- Precio: A partir de 80€
1. Mucho tiempo sin bucear
Esta es la principal razón para hacer un curso de refresco.
A pesar de haber aprendido a bucear, después de un tiempo puede que no estemos tan seguros de ciertos puntos como: montar el equipo, la flotabilidad, las señales… Por lo que hacer un ReActivate de forma individualizada nos sirve para recordar todo lo necesario, sin la presión de bucear en un grupo.
2. Recuperar la confianza
Determinadas situaciones hacen que disminuyas o pierdas la confianza en tus habilidades como buceador. Hacer una inmersión sencilla con un instructor es una buena forma de recuperarla, siempre en un entorno seguro y controlado.
3. Ganar experiencia
En ocasiones podemos no sentirnos suficientemente a gusto con nuestras habilidades para realizar ciertas inmersiones o actividades.
Durante estas actividades se pueden revisar los ejercicios y habilidades con las que nos sintamos menos cómodos para ir mejorando de forma progresiva, por ejemplo el ejercicio de vaciar la máscara 😉
También es útil si estás pensando en continuar tu formación de buceo pero tienes un poco olvidado lo que aprendiste en tu Curso de Open Water.
4. Entorno nuevo
Cada zona de buceo tiene unas condiciones determinadas que pueden ser muy diferentes a las que estamos acostumbrados.
En estos casos, hacer un refresco en la zona puede sernos de gran ayuda antes de bucear con un grupo, ya que podremos acostumbrarnos a las nuevas condiciones a nuestro ritmo y sin presión.
5. Después de una enfermedad u operación
Cualquiera de estas razones nos obligan a estar un tiempo fuera del agua, pero además pueden suponer un cambio físico en nuestro cuerpo que nos afecte a la hora de bucear. Es por eso que se considera una buena opción hacer un refresh tras una operación o enfermedad, para poder ver la reacción de nuestro cuerpo antes de realizar inmersiones más complejas.